Nuestro enfoque terapéutico entiende el cuerpo como una unidad funcional y busca facilitar sus mecanismos de autorregulación y auto curación a través de maniobras manuales.
Nuestras sesiones suelen tener una duración aproximada de una hora. En la primera visita se realiza una historia clínica detallada y una exploración física completa que incluye un análisis de la postura y de la función de las distintas partes del cuerpo, sin centrarse únicamente en la zona dolorosa. Nuestros tratamientos constan de una serie de maniobras manuales suaves, precisas y seguras que respetan los tejidos del paciente, sin dolor.
¿Cuántas sesiones se necesitan?
Nos encanta cuando al paciente necesita una única sesión, pero no siempre es así: depende del grado de lesión, del tiempo que lleve ahí, de los hábitos de vida y actividad laboral que realice…
Generalmente necesitamos un margen de 3 a 5 sesiones, espaciadas en el tiempo (entre una y tres semanas) tras las cuales podemos valorar la mejoría obtenida hasta ese momento.
Pero también hay pacientes que tienen problemas crónicos y en ese caso suele ser aconsejable una sesión al mes.
¿Cómo podemos ayudarte con Fisioterapia Osteopática?
La gente viene generalmente a vernos por dolores de cuello, de espalda, tendinitis, esguinces de tobillo, la famosa ciática…
Sin embargo a medida que vamos tratando al paciente van apareciendo una serie de “efectos secundarios” inesperados y bienvenidos: esos ardores de estómago debidos a la hernia de hiato se atenúan; el ritmo intestinal mejora y ya no hay que tomar 5 kiwis al día…; esas infecciones de orina tan frecuentes desde la histerectomía son más esporádicas; esa migraña el día antes de la regla ha pasado a la historia; esa sinusitis que llevaba 3 semanas dando guerra de repente se marcha a los 3 ó 4 días; ese catarro que traía el día de la sesión, sorprendentemente se pasa al día siguiente…
No hay nada de mágico en esto…simplemente, a través de la intervención sobre el aparato locomotor se pueden remover obstáculos mecánicos que perturban la correcta circulación sanguínea y linfática, y se consigue una normalización del tono del sistema nervioso autónomo, mejorando así el funcionamiento del cuerpo. Donde más podemos ayudar es en el caso de problemas funcionales leves de origen mecánico. En casos severos y cuando la estructura (los tejidos) está dañada, nuestra acción será más un complemento al tratamiento médico.
¿Y a ti, en qué podemos ayudarte?
“Todo lo que uno hace es comenzar un tratamiento, las fuerzas terapéuticas presentes en el organismo lo finalizan” James Jealous D.O. (1943-2021)